¿A qué le debo prestar atención cuando leo la etiqueta nutricional?

La etiqueta nutricional corresponde a la descripción contenida en el rótulo de un alimento o producto, que se hace con el fin de informarnos sobre el contenido de nutrientes, los ingredientes, propiedades nutricionales y propiedades de salud, entre otros.

El etiquetado nutricional frontal de advertencia nos ofrece información y nos advierte, sobre si el producto es alto en los denominados nutrientes críticos: sodio, grasas saturadas, grasas trans, azúcares o si contiene edulcorantes. El consumo en exceso de estos nutrientes críticos y de edulcorantes, puede tener efectos perjudiciales para la salud. Entre más sellos tenga un producto, mayor será este efecto.

Además, debes saber que las bebidas ultraprocesadas azucaradas y los productos comestibles ultraprocesados industrialmente y/o con alto contenido de azúcares añadidos, sodio o grasas saturadas, tienen el denominado impuesto saludable, que los hace más costosos en el momento de la compra. Este impuesto se ha establecido, con el fin de desincentivar la compra de estos productos, debido a los efectos nocivos que pueden tener.

Puedes identificar los sellos fácilmente; éstos deben aparecer en la cara frontal de la etiqueta de los productos y deben tener las características que se muestran a continuación:

Al tamaño de la porción: Los valores de la tabla nutricional se presentan por una porción y por 100 g (para sólidos) o 100 ml (para líquidos). Muchos productos contienen más de una porción, así que, si la porción equivale a 40gr, y el paquete contiene 80gr, significa que debes multiplicar todos los valores, de la porción, por dos. En ese caso si el valor del sodio fuese, por ejemplo, de 40 mg, al consumir el paquete completo estaríamos consumiendo realmente 80 mg de sodio.

La cantidad de ingredientes del producto: Entre menos ingredientes tenga el producto, mucho mejor, pues significa que es menos procesado. Además, es importante fijarse muy bien en el orden de los ingredientes, ya que estos se encuentran en un orden de mayor a menor contenido. Es decir, si el primer ingrediente que aparece es el azúcar, este es el ingrediente que se encuentra en mayor cantidad en el producto. Si un producto tiene azúcar entre sus tres primeros ingredientes, es mejor evitarlo.

Al tipo de ingredientes del producto: Si dentro de los ingredientes del producto se encuentran algunos que no sueles tener en tu cocina, no sabes pronunciar y por ende no reconoces, evita consumirlo.

Al contenido de grasas saturadas, grasas trans, sodio, y azúcar: Entre menos contenido de estos nutrientes críticos tenga el producto que vas a consumir, es mucho mejor para tu salud.

El contenido de micronutrientes: Todos los productos que cuentan con tabla nutricional, deben por ley, informar sobre el contenido de Vitaminas A y D, Hierro, Zinc y Calcio. En caso de no contener ninguno de estos micronutrientes, deben decirlo en una nota aclaratoria. Si bien, algunos productos declaran en sus tablas nutricionales, que contienen vitaminas y minerales, estos micronutrientes pueden ser suplementos, es decir artificiales. Por eso es muy importante consumir alimentos reales y naturales que contengan vitaminas y minerales sin necesidad de recibir ningún tipo de procesamiento.

Actividad para realizar en familia: leyendo críticamente las etiquetas nutricionales

 

El tiempo que una persona demora para seleccionar un producto que va a comprar, es en promedio 10 segundos (Lobstein y David, 2009).

Por lo anterior, no es raro que muchas veces elijamos productos con altos contenidos de grasas saturadas, azúcares o sodio que, si son consumidos de forma habitual, pueden aumentar el riesgo de que desarrollemos diferentes enfermedades. Sin embargo, si nos fijamos bien, la presencia de los sellos frontales de advertencia nos permite tomar decisiones informadas sobre la compra de productos. 

Con el fin de analizar bien y tomar las mejores decisiones sobre lo que deseamos comprar, hay algunos pasos que podemos realizar en familia para analizar críticamente lo que dicen las etiquetas nutricionales.

Para empezar, debemos:

Paso 1: Revisar los sellos de advertencia: entre más sellos tenga un producto, mayores serán los efectos perjudiciales sobre tu salud y la de tu familia.

Si quisiéramos corroborar los sellos que debe tener el producto, podemos realizar los cálculos de la siguiente manera:

Fijarnos detenidamente en las calorías totales de la porción, los gramos de grasas saturadas y azúcares añadidos, así como los miligramos de grasas trans y sodio que contiene. Para identificar qué sellos deben llevar.

Veamos un ejemplo con unas galletas ficticias:

Grasas saturadas y grasas trans: Para saber si el producto tiene exceso en grasas saturadas y/o en grasas trans,  debemos saber que cada gramo de grasa aporta 9 calorías. Por esta razón siempre debemos multiplicar los gramos de grasa por 9. Según el ejemplo daría así:

– Grasa saturada: 3g X 9 = 27 calorías
– Grasa trans: 0g X 9 = 0 calorías

Las grasas trans, generalmente se expresan en miligramos, por lo que, para realizar el cálculo, previamente debemos convertir ese contenido a gramos dividiéndolo entre 1.000.

La Resolución 2492 del 2022 del Ministerios de Salud y Protección Social, establece que:

– Un producto tiene EXCESO EN GRASAS SATURADAS cuando el porcentaje de calorías que aportan estas grasas es igual o mayor al 10% del total de las calorías del producto.

– Un producto tiene EXCESO EN GRASAS TRANS, cuando el porcentaje de calorías que aportan estas grasas es igual o mayor al 1% del total de las calorías del producto.

Por esta razón debemos hacer una regla de tres simple. Para el caso de las grasas saturadas con el producto del ejemplo sería:

La respuesta es: 22.5%. Dado que esto es más del 10%, estas galletas son un producto
con EXCESO EN GRASAS SATURADAS.

Azúcares añadidos: Para saber si es alto en azúcares debemos saber que cada gramo de azúcar aporta 4 calorías. Por esta razón siempre debemos multiplicar los gramos de azúcares añadidos por 4. Según el ejemplo daría así:

– Azúcares: 6g X 4 = 24 calorías.

La Resolución 2492 del 2022 del Ministerios de Salud y Protección Social, establece que:

– Un producto tiene EXCESO EN AZÚCARES cuando el porcentaje de calorías que aportan los azúcares añadidos es igual o mayor al 10% del total de las calorías del producto.

Por esta razón debemos hacer nuevamente una regla de tres simple. Para el caso de del producto del ejemplo sería:

La respuesta es: 20%. Dado que esto es más del 10%, estas galletas son un producto
con EXCESO EN AZÚCARES.

Sodio: Para saber si el producto es alto en sodio lo único que debemos hacer es dividir los miligramos de sodio sobre las calorías totales del producto. Para el caso del producto del ejemplo sería:

 180 mg/120 calorías= 1.5

La Resolución 2492 del 2022 del Ministerios de Salud y Protección Social, establece que:

– Un producto tiene EXCESO EN SODIO cuando el resultado es mayor o igual a 1

El resultado de la división es: 1,5. Dado que esto es mayor que 1, este producto tiene
EXCESO EN SODIO.

Como vimos, no es fácil saber si un producto comestible ultraprocesado es alto en grasas saturadas, azúcares o sodio. Por esta razón, es importante que como madres, padres y cuidadores enseñemos a nuestras hijas e hijos a leer las etiquetas de manera crítica y a preferir los alimentos naturales (sin etiquetas) que nos brindan los nutrientes necesarios para crecer sanos y fuertes.

Paso 2: Identificar cuántos ingredientes tiene el producto. Esto suele estar en la parte de atrás de los empaques. Si son cajas puede estar a los lados. Entre menos ingredientes tenga, mucho mejor.

Paso 3: Identificar cuántos de esos ingredientes usas en casa para cocinar.